La sal negra del Himalaya o kala namak, es un sal no refinada de origen volcánico que se utiliza sobre todo en la cocina hindú o pakistaní. El nombre que recibe se debe a su particular apariencia de color negro-rosado debido a la presencia de pequeñas cantidades de hierro y otros minerales.
Tiene un sabor que sorprende al paladar por su sabor a huevo, lo que la hace ideal para recetas de tortillas y revueltos en la cocina vegana.
Comparada con la sal común tiene menos contenido en sodio lo que la hace recomendable para todas aquellas personas que necesiten dietas bajas en sodio, por ejemplo las personas con hipertensión arterial o problemas cardiacos. Ayuda a la digestión. Recomendada para personas que sufran de ardor estomacal o de flatulencias frecuentes. En la tradición de la medicina Ayurvédica la sal negra también es utilizada por su excelente poder como laxante suave. También se dice que por su alto contenido mineral es una sal que mejora la vista.